mesoamericana: la enfermedad renal de los agricultores de la región

·         Afecta a los agricultores jóvenes masculinos que trabajan en cultivos de la costa pacífica centroamericana.

·         Sus causas son desconocidas y es una enfermedad silenciosa que afecta a los riñones.

Un tipo de enfermedad renal crónica afecta, desde hace aproximadamente dos décadas, a los agricultores jóvenes masculinos, que laboran en cultivos a lo largo de la costa pacífica de Centroamérica; en particular a los trabajadores de la caña de azúcar. Se trata de la nefropatía mesoamericana (MeN, por sus siglas en inglés), la cual es considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un padecimiento de gran importancia a enfrentar en la región.

A diferencia de la enfermedad renal crónica común, que puede surgir en una persona debido a la diabetes, hipertensión arterial, edad avanzada u obesidad entre otros, la nefropatía mesoamericana es de causas desconocidas y continúa siendo un enigma para la medicina actual.

“La aparición de una enfermedad renal crónica de origen desconocido, que afecta a los trabajadores agrícolas de nuestros países, se ha convertido en un reto epidemiológico y de salud para los especialistas, la comunidad y las autoridades de la región en general”, comentó el Dr. Ricardo Montenegro, Director Médico de Roche Centroamérica y Caribe. “Varios talleres internacionales se han llevado a cabo, desde el año 2005, en Centroamérica, para evaluar las características demográficas y epidemiológicas que, eventualmente, pueden influir en el padecimiento de esta enfermedad”.

Esta nefropatía se presenta en las regiones costeras de los diversos países de Mesoamérica -desde el sureste de México hasta Panamá- y mantiene un patrón bastante constante y creciente en cada uno de estos. Según la Unidad Nacional de Atención al Enfermo Renal Crónico (UNAERC) y el Servicio de Nefrología del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), un 78% de la población en hemodiálisis de la Costa Sur, que atiende el Seguro Social, sufre la enfermedad renal crónica de origen desconocido.

La insuficiencia renal crónica común y la de origen desconocido, como también se le llama a la nefropatía mesoamericana, afectan la capacidad de los riñones de desempeñar funciones vitales para el organismo. Lo riñones son los “filtros naturales” del cuerpo, ya que lo mantienen libre de toxinas a través de la orina; regulan la presión arterial, ayudan a mantener los huesos saludables y liberan la hormona eritropoyetina, que estimula la producción de glóbulos rojos por la médula ósea.

Características y potenciales factores de riesgo

La nefropatía mesoamericana es una enfermedad de carácter laboral que impacta a los agricultores del pacífico del país, quienes realizan trabajos pesados en condiciones climatológicas de calor extremo. Suele presentarse en hombres jóvenes, entre los 30 y 50 años de edad, y según estudios, los más afectados son los trabajadores de cultivos de caña de azúcar.

“Se caracteriza por ser una enfermedad silenciosa y que reduce, progresivamente, la capacidad de filtración de los riñones. Caso contrario a la enfermedad renal crónica común, la persona puede presentar poco o ningún grado de proteína en la orina (proteinuria). Además, puede tener una leve cantidad de ácido úrico en la sangre (hiperuricemia) y un bajo nivel de potasio (hipocalemia)”, mencionó el Dr. Montenegro. (Ver recuadro: “Consejos para disminuir la posibilidad de padecer la nefropatía mesoamericana”).

Si bien sus causas específicas se desconocen, los trabajadores agrícolas están expuestos a una serie de factores que potencialmente pueden influir en el padecimiento de la enfermedad, entre estos destacan:

·         Exposición a altas temperaturas y humedad: pueden desencadenar estrés térmico.

·         Nivel elevado de deshidratación producto del clima en el cual labora el agricultor.  

·         Condiciones de trabajo muy extenuantes: superficies ásperas, horarios muy extensos, pocos días de descanso y gran esfuerzo físico en condiciones extremas de calor.

·         Uso de antiinflamatorios, analgésicos y antifebriles (llamados Antiinflamatorios no esteroides o AINES) en altas dosis: para tratar la inflamación, el dolor, cansancio y la fiebre producto de las labores diarias. Su uso descontrolado suele reducir el flujo de la sangre en los riñones.

·         Alta ingesta de bebidas con azúcar (fructuosa) que también puede provocar deshidratación.

·         Condiciones sociales: la pobreza extrema fomenta que los jóvenes trabajen en cultivos y por ende, se expongan a los demás posibles factores de riesgo.

En el “Primer Taller de Investigación Internacional sobre Nefropatía Mesoamericana”, organizado en el año 2012 en Costa Rica, los especialistas en epidemiología y profesionales de la salud que asistieron, llegaron al consenso de que muy probablemente la causa de esta enfermedad es multifactorial y puede contemplar uno o varios de los factores anteriores. Sin embargo, los estudios acerca de la nefropatía mesoamericana continúan.  

Acudir al médico para el tratamiento adecuado

Aunque esta nefropatía suele ser silenciosa, existen algunas señales que pueden alertar a los agricultores del padecimiento en fase temprana, como lo son: presión alta, hinchazón en las piernas y cambios en la coloración de la piel. Ante estos signos, lo recomendable es que la persona asista al médico de referencia, para los exámenes respectivos, ya que si no se trata a tiempo puede causar un fallo renal.

En caso de un diagnóstico de nefropatía mesoamericana, los tratamientos indicados por el médico deben utilizarse adecuadamente, porque pueden desacelerar el avance del padecimiento y prevenir o retrasar un fallo renal a futuro.

Si el paciente padece una enfermedad renal crónica terminal, el especialista le indicará si debe realizarse diálisis (proceso que elimina las sustancias dañinas de la sangre, por medio de una máquina, cuando los riñones no funcionan) o es necesario recibir un trasplante de riñón.

“De acuerdo con cifras de la OMS, aproximadamente uno de cada 10 adultos tiene algún grado de enfermedad renal crónica e incluso este padecimiento ocupa el lugar número 12, en la lista de las principales causas de muerte en el mundo. Por ello, no solamente es necesario que las personas cuiden sus riñones, sino también que los investigadores puedan definir pronto la causa de la nefropatía mesoamericana y determinar cómo se puede prevenir adecuadamente”, concluyó el Dr. Ricardo Montenegro.